Fotografía cortesía de Patrick Fore 🧡
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Por qué un blog en 2024

En este artículo hablo de blogs de carácter personal, no de blogs corporativos, institucionales, etc. Esos tienen otras razones para seguir siendo útiles.

Esta es la primera entrada de un blog en el que controlo todo su proceso generativo y contenido. Detalles técnicos 👇 al final.

Estoy cansado de leer sobre la importancia de dejar por escrito tu oficio o pensamientos aunque nadie te lea. No le veía sentido práctico y no sentía que me ayudara, pero recientemente le he visto dos utilidades.

La primera, tener un espacio donde compartir lo que suelo repetir con cada alumno. Así puedo dejar directamente comentarios, recomendaciones, patrones, etc., limitándome a mandarles el enlace y no robándoles tiempo en clase.

La segunda, más personal y clásica de un blog, es dejar algún rastro de mi evolución. Muchas veces he intentado recordar sin éxito qué pensaba o qué razones tenía en el pasado para decir o hacer determinadas cosas, como apoyar ciertas corrientes o tecnologías. Saber cómo era ayuda a la introspección, a asimiliar y ajustar cambios.

Ventajas de un blog personal en la actualidad

Todos conocemos por qué este formato ha muerto. Un blog personal no genera dopamina, no está en medio de todo ni te da seguidores (o no tantos). De hecho requiere un esfuerzo para mejorar su visibilidad si necesitaras que otros pasen por él. Todo esto puede considerarse ventajas si lo vemos como un pequeño refugio.

Otra ventaja que surge de la adversidad solo por un cambio de enfoque es que hay menos posibilidades de negocio, lo que provoca que un blog personal se reduzca por necesidad a su esencia. Actualmente todo internet está saturado de contenido basura y autogenerado bien posicionado por magufidades del SEO, por lo que la dificultad de posicionar algo aumenta tanto que me disuade y aleja de esas ideas de pseudoéxito capitalista.

Al renunciar al posicionamiento, a las visitas e incluso a los comentarios, escribir un blog se convierte en una experiencia más personal y limpia. Y lo mejor es que me permite realizar aquellas acciones tradicionalmente superdestructivas y dañinas para el posicionamiento en un sitio normal, como borrar entradas.

Ya desde el primer párrafo que escribes puedes notar algo de no estar pululando cerca de una red social: se acabó el que secuestren tu atención, el destruir tu productividad con spam de vídeos de gatitos y Milei dando cringe.

Pero lo mejor de todo es que en este formato tienes el control de tu contenido, no hay un servicio que te diga qué puedes o no publicar. Incluso con servicios de alojamiento con restricción de contenido o posibilidad de cambiar sus políticas, siempre podrás llevártelo a otro lado. Hoy día, tener el control sobre tu contenido es un privilegio.

Por qué no tengo una sección de comentarios

Quitando que es un rollo integrar un sistema de comentarios dinámicos externo en un sitio estático, cabe aclarar que los comentarios no tienen nada de malo, de hecho tienen más pros que contras, pero para mi caso particular pesan más los contras. Mi idea es eliminar la interacción social en este espacio (más sobre esto en una futura entrada).

Entre las razones más evidentes para no incluirlos está evitarme todo tipo de spam, trolls e incluso comentarios positivos, que solo son alimento para el ego. No necesito que quede constancia de si a alguien le gusta o no lo que he escrito, aunque con ello se pierda las utilidades más importantes de los comentarios: la obtención de feedback constructivo, correcciones y sugerencias.

A ver, existe el correo electrónico, pero nadie lo usa salvo que no haya más remedio. Es una vía más directa pero con algunas desventajas, como la posibilidad de que el correo nunca llegue y ni lo sepas.

La razón de peso más típica para incluir comentarios suele estar relacionada con el SEO. Los comentarios cuentan como nuevo contenido y pueden atraer visitas por sí mismos. Todo eso me da igual, no busco visibilidad ni posicionamiento con este blog.

SvelteKit como generador de blogs estáticos

Esto es un apartado más técnico. Si no te interesa no sé qué haces leyendo este blog, para empezar.

No estoy usando ningún framework específico para blogs sino SvelteKit como generador de sitios estáticos, adaptado a mis necesidades.

Hoy día los sitios estáticos no son ninguna sorpresa. Recuerdo a principios de milenio cuando la comunidad de php te miraba raro al decir de hacer todo en estático, y lo nicho que fue Jekyll hasta que Ruby on Rails pilló más popularidad.

Entre 2022 y 2023 comencé un proyecto un poco más ambicioso al que llamé Simple Static Blog Generator, fundamentado en TypeScript y MarkDown. Estaba orientado a experiencia de desarrollo con capa de vista totalmente desacoplada, teniendo solo una implementación básica de demostración con pug como sistema de templates.

Aunque utilizaba herramientas modernas, integrar con frameworks de SPA, reactividad y diseño orientado a componentes era demasiado reinventar la rueda. Pensando en rediseñar el sistema sobre Nuxt (Vue), conocí Svelte y SvelteKit. El proyecto de Rich Harris me parecía increíble como para no darle una oportunidad, y no me arrepiento.

SvelteKit es a Svelte lo que Next a React o Nuxt a Vue, aunque con soporte oficial; digamos que SvelteKit/Svelte son parte del mismo proyecto en manos de la misma comunidad y se desarrollan completamente a la vez.

Quizás seas como yo y no te guste este tipo de frameworks “todo en uno” porque, al menos en flujos normales, implica una no obligatoria pero recomendada implementación de back end; pero su modo generador de sitios estáticos es con mucho margen la mejor experiencia de desarrollo que he tenido.

Alojar un sitio estático es prácticamente gratuito y apenas consume recursos. El servidor, a fin de cuentas, solo se dedica a enviar ficheros. Existen diversos servicios gratuitos para alojarlo, como Github Pages, donde justo está este blog.

En términos de seguridad, los sitios estáticos son más seguros por naturaleza. Los ataques de tipo DDoS solo funcionan por saturación de red y no por cómputo, dado el esfuerzo mínimo que tiene que hacer el servidor. Esto no evita que se agoten las cotas de recursos en servicios de hosting y es crítico cuando no se tiene ningún control del backend. En servicios como Pages donde además no se dispone de formas claras de auditar los ataques, solo se complica, especialmente con capas gratuitas.

Hay otros beneficios (y contras), pero no voy a dar más la chapa en esta entrada. Si tienes dudas concretas sobre implementación o quieres hacerte tu propio sitio estático con estas tecnologías y no sabes ni por dónde empezar déjame un comentario mándame un correo.